Desde la tristeza y la rabia

En la colonia.
Desde la tristeza y la rabia.
    Hay ocasiones en las que lo que debes transmitir en un texto te desgarra por dentro, a la rabía y la indignación se suman rostros desconocidos que jamás he visto, que puedo imaginar, vidas por hacer, sonrisas y lagrimas que quedaron cercenadas, carcajadas que nunca fueron, caricias que no se dieron, besos que no llegaron a los labios.
    Cuando, con dificultad, logró encontrar algunas informaciones, unas del 2012, otras parciales del 2013, sobre los suicidios en Canarias, no sé si podré afrontar este texto.
    En el 2012, solo en Gran canaria, se produjeron 137 suicidios, simplemente estableciendo un número similar en Tenerife, estaríamos en torno a 270-275. No resulta disparatado, ni excesivo pensar que, entre las cinco islas restantes, nos aproximemos a un número cercano a un suicidio por día.
    Estas cifras no han disminuido considerablemente en estos años, al menos 2013, se sostenían y con posterioridad contamos con escasos datos. Por diversos motivos esta información no suele transcender y existe un acuerdo tácito para no difundir estos hechos para evitar el efecto mimesis o llamada.
    Estos datos se suman al hecho que las enfermedades mentales en Canarias ocupan el segundo lugar en las afecciones de la población de las islas. Hay alguna asociación de familiares de enfermo que ha apuntado que en pocos años será la primera. Habla abiertamente de pandemia.
    Podríamos reivindicar y reivindicamos la muy necesaria mejora de todos los servicios, tanto de prevención, como de atención sanitaria y social. Es esencial que esto se haga, pero ya vemos como se deteriora día a día la sanidad en las islas y no será este gobierno encabezado por Clavijo, presidente pusilánime y pánfilo, el que lo resuelva. El sigue de vocalista de la orquesta Viva España.
   

Pero, con todo lo que es necesario hacer para ayudar y contribuir a la atención de este sector importante de la población, me permito apuntar algunas cuestiones esenciales. Los suicidios, como alto terminar, muestran la angustia e impotencia de nuestra gente. Este unido al volumen de enfermos psíquicos, estamos ante un hecho que muestra al menos dos aspectos:

1. Como ya planteo Franz Fanon y otros, las sociedades colonizadas enferman y somatizan el dominio, la baja autoestima, la pérdida de valores y referentes culturales, la impotencia.
2. El modelo de desarrollo económico neoliberal impuesto en las sociedades actuales está diseñado contra la mayoría, a cuenta de la mayoría y es netamente destructivo. Como ya apuntan algunos sociólogos el modelo neoliberal cuenta entre sus cifras con lo que denomina la infraclase, que sobrevive en los márgenes del sistema, pero que jamás tendrá ninguna oportunidad. Una orquilla importante de la población
La confluencia de estos dos eje está haciendo un daño irreparable en nuestra nación, por ello urge empoderar a nuestro pueblo para abordar la inexorable tarea de descolonización y ser protagonistas altivos de nuestro futuro.
En África, a martes 13 de sin tino.
Chemahaguiar